A pesar de las reglamentaciones, muchos jóvenes se las ingenian para sortear los controles e ingresar con botellas de alcohol y parlantes. Miles de personas despiden la tarde y reciben la noche a orillas del mar.
Mientras los centros de testeo están desbordados, en simultáneo en Playa Grande acontece un clásico de cada temporada de verano en Mar del Plata: los after beach. Sin distanciamiento social ni tapabocas, y con mucho alcohol, miles de jóvenes se congregan para bailar a orillas del mar y disfrutar del atardecer.
La postal se repite cada verano, pero a pesar del exponencial aumento de contagios de coronavirus que llevó a Mar del Plata a registrar cifras récord, no cesan. Playa Grande suele ser el punto de encuentro de miles de jóvenes, pero la convocatoria se replica en distintos balnearios de la zona sur o norte.
Miles de personas asisten a los after beach en Mar del Plata. Foto: 0223.
Después de las 17, es más habitual toparse con grupos de jóvenes marplatenses o turistas que encienden sus parlantes y abren las heladeritas cargas de alcohol y hielo: cerveza, fernet y gin son los tragos más comunes. Con la caída del Sol, los "tarjeteros" se hacen presentes en la playa para invitar a la multitud a seguir la fiesta en el boliche.
La falta de cuidados en medio de una pandemia que no da tregua, está a la vista. Hasta el martes, a pocos metros del tumulto de personas se emplazaba un dispositivo de testeo que desbordaba de personas
En Mar del Plata está prohibido el consumo de alcohol y el uso de parlantes en la playa. La Municipalidad de General Pueyrredon despliega operativos, pero no puede evitar los desbordes y muchos se las ingenian para sortear los controles. Este jueves se secuestraron 450 litros de bebidas alcohólicas. La cifra es tres es veces mayor al promedio que se registra cada temporada de verano.
Fuente: 0223